La Iglesia de San Vicente Mártir en Braojos de la Sierra es conocida como la 'Catedral de la Sierra Norte'. Sus más de 4 siglos de historia dan cuenta de la importancia de este templo, considerada una joya arquitectónica de la zona.
Aunque ha sufrido numerosas ampliaciones y recrecimientos, la planta actual es del siglo XVII. Tiene dos naces y una cúpula sobre crucero. Con apenas adornos en su exterior, llama la atención que posee uno de los interiores más ricos de la comarca.
Se pueden encontrar retablos elaborados por el escultor Gregorio Hernández en el Renacimiento, del maestro Vincenzo Carduccio y Pedro de Berruguete 'El Viejo'.
Su pila bautismal es del siglo XV y la imagen de Cristo crucificado es del siglo XIV. También se encuentra la capilla de Nuestra Señora la Virgen del Buen Suceso, con una talla de la imagen del siglo XII.
Las imágenes de la parte alta corresponden a San Miguel, San Pedro y San Pablo; la Asunción y una orla de angelotes ocupan el centro. Debajo, en un notable relieve, la Virgen impone a San Ildefonso la casulla. Frente a la puerta de entrada puede verse un retablo con las figuras de San Sebastián, San Roque, San Blas y el Ángel de la Guarda.
Su torre consta de cuatro plantas de clara estructura militar y data de los siglos XIV-XV. Subiendo por unos viejos escalones de madera se accede al campanario que es posterior a la instalación de la torre y tiene unas vistas espectaculares. Su interior se libró de la quema durante la Guerra Civil gracias a los vecinos del pueblo.