Marin Eugene Sabau, conocido como el 'pistolero de Tarragona', ha recibido este martes la eutanasia en el Hospital Penitenciario donde estaba ingresado. La había solicitado a raíz de las lesiones sufridas durante el tiroteo en el que hirió a tres excompañeros de trabajo. Se ha sometido a la muerte asistida sin rendir cuentas ante la justicia y sus víctimas. Se trata del primer preso al que se le practica la muerte asistida en España.
"Voy a salir en las noticias". Este era el mensaje que enviaba el 'pistolero de Tarragona' a sus jefes poco antes de irrumpir en la empresa de seguridad donde trabajaba. Fue el 14 de diciembre del año pasado, y una vez dentro disparó contra tres de sus excompañeros. En su intento de fuga disparó a un Mosso d'Esquadra y se atrincheró en una masía abandonada.
El enfrentamiento con los agentes le dejó graves heridas y quedó parapléjico. Solicitó la eutanasia y este martes ha sido sometido al procedimiento. Las víctimas han intentado hasta el ultimo momento paralizar el proceso pero no ha sido posible.
“Podrían haber paralizado nuestro recurso y haber detenido provisionalmente la eutanasia hasta que se celebrar el juicio y tuviéramos una sentencia. No han tenido derecho a un juicio justo. Algo que dice la ley, la constitución española y convenios europeos. Lo que haremos será pedir a la Generalitat las indemnizaciones por las heridas sufridas en acto de servicio”, explica José Antonio Bitos, agobado del sindicato Uspac.
Una inyección de fármacos ha acabado en cinco minutos con la vida del primer preso al que se le practica la eutanasia en España.