El riesgo de sufrir deterioro cognitivo aumenta si pasamos muchas horas delante del televisor. Utilizar el ordenador, por el contrario, disminuye el riesgo de demencia. Estos son los resultados de un estudio estadounidense sobre la importancia tener un sedentarismo activo.
Aunque la estrecha relación entre deporte y salud mental es de sobra conocida, a medida que cumplimos años el sedentarismo va ganando terreno en nuestro día a día.
“Si uno está haciendo una actividad en la que uno manda, en la que uno tiene iniciativa es distinto que estar sentado en una actividad completamente pasiva” explica Pablo Martínez-Lage, neurólogo de la Fundación CITA-Alzhéimer.
Si queremos envejecer de forma saludable, evitando el deterioro cognitivo, el sedentarismo no debe ser pasivo. Así, investigadores estadounidenses han demostrado que el riesgo de sufrir demencia aumenta un 40% en las personas que se pasan más tiempo delante de la televisión, pero que este riesgo se reduce si dedicamos nuestro tiempo a conductas más activas, como usar el ordenador.
Otro estudio de neurocientíficas alemanas asegura que el riesgo de estar muchas horas delante de la televisión, no disminuye aunque luego se haga ejercicio físico. El riesgo de demencia solo se reduce con actividad física e intelectual.
Martinez-Lage da las claves de una intervención intermodal beneficiosa: “actividad física, actividad intelectual, comer bien, gestionar las emociones, detectar la depresión, detectar la ansiedad y el estrés" . En definitiva, pasear a buen ritmo, quedar con amistades y tener la mente activa en todo momento. Y si es posible, mejor acompañado que solo.