La titular del juzgado número 6 especializado en violencia sobre la mujer ha acordado la puesta en libertad con medidas cautelares de control judicial y orden de alejamiento para el hombre que el pasado día 30 apaleó a su esposa en el distrito madrileño de Usera.
La jueza, en funciones de guardia, ha acordado, de conformidad con lo solicitado por el fiscal y la acusación particular, una orden de protección y alejamiento del supuesto agresor sobre su víctima. Además, ha ordenado la inmediata puesta de un dispositivo telemático de control, popularmente conocido como "pulsera de control", que ya lleva el detenido.
Tras prestar declaración en sede judicial, el hombre ha quedado imputado inicialmente por la supuesta comisión de un delito de lesiones en el ámbito familiar. No obstante, esta calificación penal es provisional y podría variar según se vayan practicando las correspondientes diligencias de investigación en el marco de la instrucción judicial, subraya el TSJM.
El hombre, de 41 años, fue detenido el domingo en una vivienda de Usera después que la mujer, de 45 años, pudiera escapar de la casa con sus dos hijos, de 8 y 10 años de edad, y avisar a la Policía.
A la llegada de los agentes al lugar, la mujer estaba en el portal del edificio con los niños, "en estado se shock, con heridas en las manos, en las piernas y en los labios", según fuentes polciales.
La mujer relató a los agentes que el hombre la había retenido desde la una de la madrugada y que la había golpeado con un palo de aluminio y le había propinado patadas, puñetazos y rodillazos, todo en presencia de los menores.
En un momento de descuido del agresor, la mujer pudo huir hacia la calle en compañía en de los niños y llamó para pedir ayuda.
La mujer fue atendida por los sanitarios del SAMUR-Protección Civil y trasladada al hospital 12 de Octubre.