Se acerca la fecha tope, el 30 de junio y Hacienda está esperando. Hay tres formas de presentar la declaración: Internet, Oficinas de la Agencia Tributaria y por teléfono.
El Supremo ha aceptado un recurso que protege a quienes entregaban la declaración de forma analógica. En 2019, hasta que lo suprimió el Gobierno, lo hicieron 350 mil personas. Muchos denuncian que les han marginado y para ellos entregarlas por los canales modernos es un problema
Desde 2019 ya no es posible presentar la declaración de la renta en papel. La Agencia tributaria anuló ese año el trámite de entrega física de la renta en ventanilla, ya fuera en la propia Hacienda o en un banco. Ahora el Tribunal Supremo ha admitido a trámite el recurso de casación de los asesores fiscales contra esta orden ministerial.
La Asociación de Asesores Fiscales considera que la medida es discriminatoria y deja en desventaja a los ciudadanos con menor cultura digital. 2017 fue el último ejercicio que se pudo hacer en papel, que emplearon 350.000 contribuyentes.
Desde entonces Hacienda ha reforzado sus canales de renta digital y telefónica, pero se considera que ya no hay vuelta atrás en el proceso digital de la administración. No solo se trata de digitalizar, también de potenciar el uso cero de papel en la administración.