Vecinos de Tetuán impiden obras en una cocina fantasma del chef Dani Martín para las que no tenían licencia
"Seguiremos luchando hasta que cierren unas cocinas que deberían estar ubicadas en una zona industrial y no junto a nuestras viviendas"
Denuncian molestias e inseguridad porque la altura de las chimeneas es "insuficiente"
Foto: 120 Minutos |Vídeo: Telemadrid
REDACCIÓN/ AGENCIAS
Las nuevas obras en las cocinas del chef Dani García han sido paralizadas gracias a la denuncia vecinal de los vecinos de Calle Morando, en Tetuán.
El pasado sábado, los vecinos llamaron a la Policía Municipal al presenciar que un camión cortaba la calle y descargaban una grúa y una estructura metálica para la fachada. Una patrulla se personó en el lugar y requirió la documentación de los trabajos a los responsables de la cocina industrial, quienes "no tenían licencia ni permiso para cortar la calle".
Los vecinos expresan que "es una pequeña victoria, pero hemos de seguir luchando hasta que cierren unas cocinas que deberían estar ubicadas en una zona industrial y no junto a nuestras viviendas".
Eva y Raquel, dos de las afectadas, muestran a Telemadrid cómo es vivir en sus casas: "Hay olor a fritanga continuamente y en verano sube la temperatura hasta cuatro grados. Los ruidos son continuos y los 'riders' que vienen a recoger los pedidos están incordiando y a veces no podemos sacar nuestros coches", denuncia Raquel.
"Vinieron aquí con una grúa muy grande y no tienen permiso de obras ni declaración responsable. Por supuesto, no tienen el permiso de la comunidad de vecinos", declara Eva. "Tenemos miedo a que si elevan más las chimeneas se nos puedan caer encima algún día".
La Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) presentó en septiembre una denuncia ante el Ayuntamiento de Madrid para aclarar "la situación legal de la cocina industrial y que explicara públicamente la secuencia errática de decisiones que afectan al local". También ha pedido una inspección urgente del inmueble.
Según la Federación, en octubre se declaró que, tras medir los niveles sonoros transmitidos por el funcionamiento de las chimeneas y sistema de climatización, "la cocina industrial incumple la Ordenanza de Protección contra la Contaminación Acústica y Térmica (OPCAT) al superar el límite de ruido en 4 dBA".
La normativa en vigor dicta que las cocinas industriales que se implanten en la capital en locales de uso industrial deben tener un máximo de 350 metros cuadrados. Asimismo, se obliga a que tengan en el interior del establecimiento las zonas de espera, carga y descarga y estancia de los transportistas.