El circo de la Fórmula 1 llega a la cuna mundial del espectáculo. Las Vegas, la ciudad del pecado, de las luces, del show permanente se cita, este fin de semana con la Fórmula 1.
Los pilotos de Mercedes ejercen de maestros de ceremonias para enseñarnos el circuito urbano de la manera más original. Un circuito únicamente iluminado por los destellos de miles de drones que les dirigen en la oscuridad
Poco a poco, los drones marcan el camino y forman el logotipo publicitario que financia el espectáculo. Pura magia. ¿Hay quién dé mas?