Deportistas como Pedro García Aguado, Carolina Pascual o Rafa Pascual no cotizaron durante sus años en activo
Foto: Redacción |Vídeo: Telemadrid
Pedro García Aguado fue un importante jugador español de waterpolo. Participó en cuatro Juegos Olímpicos y obtuvo numerosos premios y reconocimientos, como un buen número de medallas con la selección.
Como profesional estuvo cobrando, durante diecisiete años, de la Federación y de los clubs. Pero durante todo ese tiempo no cotizó nada. “Ahora lo sé. A lo mejor me tendría que haber hecho autónomo y haber empezado a cotizar por mi parte”.
“Me retiré y no tuve nada. No tuve finiquito ni tuve nada”
Una situación similar le ocurrió a la gimnasta rítmica Carolina Pascual, que participó en importantes competiciones internacionales y de alto nivel.
A pesar de ganar una medalla olímpica (la plata de los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992) reconoce que no tuvo “paro ni cotización. Una vez que te has retirado, nada de nada”.
Tampoco tuvo paro el exjugador de voleibol Rafa Pascual. “En su momento el voleibol no era un deporte profesional. En otros países sí que existen las ligas profesionales, pero aquí no”.
“El deporte te da un buen soporte económico durante unos años, pero luego cae drásticamente porque, cuando se corta, vas a cero”
Amaya Valdemoro, una de las mejores jugadoras españolas de baloncesto de la historia, recuerda que en su época “no estaba todo regularizado”, aunque ahora la situación ha cambiado: “la situación de las chicas de baloncesto de ahora sí que está regularizada”.
La situación de Eli Pinedo, exjugadora de balonmano, fue diferente. “He tenido la suerte de cotizar durante más de doce años”.
