No paran de salirle problemas y críticas al restaurante de Iñigo Onieva. Hace pocos días, varios vecinos se quejaban de la gran cantidad de basuras que acumula el restaurante con sus residuos. Los afectados afirmaban que no solo hay comida, también botellas y otros restos de materiales como cajas lo que demuestra que el reciclaje no es una de sus preocupaciones. Los vecinos aseguran que los contenedores llegan a un punto que se encuentran desbordados.
Otro problema al que se enfrenta el empresario es a las opiniones y críticas que recibe su local. El marido de la marquesa de Griñón recibió críticas por dejar él y sus allegados reseñas positivas y la mejor puntuación en Internet. Además de estos sucesos, un crítico influencer se quejó del precio y del servicio.
Ahora el último en dejar un comentario ha sido su cuñado Julio José Iglesias. El hijo de Julio Iglesias asegura a la prensa que el restaurante no es tan asequible: “Bueno, barato no es”. El cantante habló sobre la vez que fue a comer y volvió a mencionar el tema del precio: “No me acuerdo de quién pago ese día. Yo creo que no era barato”.