Los japoneses cocinaban con esta técnica hace ya dos mil años. Se llama Robata y una parrilla especial es la base donde se asan carnes y pescados. En el restaurante Calista, en Paseo de la Castellana 95, cocinan como los antiguos pescadores japoneses, en una robata. En esta parrilla, algo más estrecha que las habituales, se utiliza carbón de encina y coco y el chef necesita una gran técnica para controlar la cocción, tanto para elaborar carnes como pescados.
En la cocina japonesa, robata-yaki hace referencia a la comida preparada frente a los clientes en la que los ingredientes, normalmente colocados en unas brochetas, son cocinados lentamente a la parilla en una parrilla al carbón.