Desde la aplicación Nextdoor, Daniel ha sido reconocido como un supervecino 2020 en su barrio de Aravaca. Construyó con sus propias manos una caseta de madera para dejar libros, como una librería portátil.
Con 71 años, este vecino proviene de una familia ebanista, de ahí le viene la pasión. En el confinamiento decidió con sus manos una caseta para que fuera punto de encuentro de lectura en el barrio. Una especie de librería portátil donde los vecinos podían ir intercambiando sus libros.
Todo tipo de libros que pueden irse cogiendo y dejando para que otros lean, a modo de intercambio. Desde Nextdoor han decidido darle una calle por fomentar la lectura en la zona, además de un cheque de 100 euros. El éxito de esta librería portátil ha sido tal que el barrio le pidió tres más.