Si hablamos de puestas de sol, nada como la Terraza Mirador. Un quiosco situado en pleno corazón de Vallecas en el parque conocido popularmente como el de las 7 tetas. Si te sientas en la Terraza Mirador y disfrutarás de una de las mejores panorámicas del skyline de la capital.
Es uno de los lugares más clásicos para contemplar el fin del día. Rodeado de colinas se pueden ver el rascacielos de Telefónica en Gran Vía, las cuatro torres de Chamartín, el Pirulí y la sierra al fondo. Además del césped para sentarse, está la Terraza Mirador. Aquí, José Antonio Ruiz lleva 33 años sirviendo los mejores mojitos.
En Madrid existen muchas terrazas con vistas impresionantes, pero en el local de este madrileño los atardeceres son solo de la Terraza El Mirador de Vallecas. Más de tres décadas lleva José Antonio al frente de este establecimiento contemplando la felicidad de sus clientes cuando el sol se pone en el horizonte.
Simpático y siempre cercano, el propietario trata con el mismo cariño a sus clientes de siempre que a los embelesados que descubren, por primera vez, el skyline de Madrid desde su mirador. "Antes trabaja en la compañía nacional de telefónica. Me prejubilé y me metí aquí a fondo. Desde que se hizo el parque se hizo el mirador, hace unos 40 años", explica.
José Antonio nos cuenta una anécdota que, según él, dicen es una leyenda: "En esta montaña todas las parejas que suben se casan, y en la de enfrente se separan", cuenta. No hay servicio de mesas, sino que la gente pide en barra y se lo sirven. "Había mucha gente que desaparecía y lo mejor es el autoservicio", añade.
"Yo soy del barrio de Vallecas. Desde que me casé, hace 43 años. El barrio ha cambiado mucho. Vallecas ha sido un barrio de muchas asociaciones y es un barrio muy unido. Es un barrio que la gente se siente muy orgullosa e identificada de ser de Vallecas", concluye.