Fernando llega a Quijorna para aprender cómo se plantan garbanzos. Allí le espera José Francisco, uno de los jóvenes de este pueblo madrileño que han querido recuperar la agricultura y uno de los impulsores de este tipo de cultivos.
Nos cuenta que se ha avanzado mucho en este tema y que ahora la siembra de realiza con este tipo de maquinaria: Un tractor con un mecanismo que permite distribuir los garbanzos en el terreno. No como antiguamente que se tenía que ir con el saco y plantándolos a mano.
Nos cuenta que la tierra de Quijorna es muy rica en silicio por la erosión de la Sierra de Guadarrama y ello hace que el garbanzo salga con una calidad inmejorable. La tradición en Quijorna viene desde hace un siglo y la de su familia también.
Llegamos hasta a su huerto y vemos los garbanzos de la temporada anterior. Allí José Francisco nos muestra la calidad del garbanzo. También cultivan lechuga, varios tipos de acelga y fresas que nacen a partir de abono natural que le proporcionan pastores de la zona.
Nos comenta que es un trabajo duro y que en los dos últimos años han sido un poco flojos pero que espera que este año se relance el negocio. Nos despedimos de allí habiendo aprendido todo sobre el mundo del garbanzo.
