En Valdetorres encontramos la única fábrica de cerámica de la región. Al frente está la familia de Raimundo Sánchez, una familia de alfareros que siempre se han dedicado a hacer cacharros de barro.
Antiguamente lo hacían en el barrio de Tetuán de Madrid pero tuvieron que trasladarse en 1977 porque el humo que producía la cocción del barro molestaba.
A mitad del campo se marcharon y allí siguen, a las afueras de Valdetorres de Jarama. Hicieron incluso hornos árabes para continuar haciendo de la manera que les enseñaron pero las tierras de Valdetorres eran muy húmedas y tenían problemas con el secado. Con la llegada de los hornos industriales y su forma de trabajar cambió aunque sigue siendo bastante artesanal.
Están especializados en pucheros y en las cazuelas que utilizamos para hacer “las fabes”. Las hacen de diferentes tamaños según el cliente, por ejemplo, venden a Japón y a ellos les hacen una medida especial, más pequeñas…
Sus cazuelas se venden en grandes almacenes. Nos enseñan el proceso de elaboración...