Desde esta noche de miércoles los conductores madrileños, notarán una mejoría en el tráfico del Nudo Norte. Abre el primer paso inferior de sus obras de remodelación que conecta el Paseo de la Castellana con la A-1, la M-11 y provisionalmente la M-30.
Se elimina así el primero de los cuatro trenzados del Nudo Norte y un punto negro para la circulación de salida de la capital por la Castellana. Del Paseo de la Castellana podemos ir ya derechos a la M-11 y a la carretera de Burgos.
Es el primer paso inferior en abrir de los del Nudo Norte, un trenzado de carriles que estaba en constante atasco. Son 240 metros que Telemadrid ha recorrido a pie y que mañana estarán abiertos al tráfico, dos carriles de salida de la capital. Durante unas semanas, el de la derecha llevará a la M-30 sur.
Así lo ha anunciado este miércoles el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, en un acto en el que ha estado acompañado por el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y en el que ha recordado que este será la segunda fase abierta del Nudo Norte, cuyas obras culminarán a lo largo del último trimestre del año tras una inversión de 42 millones de euros.
Almeida ha celebrado que se están "cumpliendo los plazos” y ha agradecido a la empresa adjudicataria (FCC) que así sea porque “no son tiempos fáciles para la ejecución de plazos debido a la dificultad de suministros”. Ha querido también dar las gracias a los madrileños por la “comprensión y generosidad” que demuestran cuando se acometen obras de estas características.
Los principales beneficiarios serán los 270.000 conductores que pasan por el Nudo Norte. Que ahorrarán más de tres mil horas diarias y también se evitarán 14 toneladas menos de CO2 en la atmósfera. Quedarán por ejecutar las conexiones de la M-11 y de Castellana con la carretera de Colmenar.