La familia de Hortensia denuncia que ha recibido una factura de la luz de 1.000 euros porque los okupas llenan la piscina de su vivienda de Colmenar Viejo.
Los problemas de esta familia comenzaron el pasado 23 de mayo, cuando una vecina les alertó de que había personas dentro de su vivienda. A principios de agosto, el yerno de la afectada declaró que los okupas "estaban pasando el verano tranquilamente", haciendo uso de toda la propiedad y tras recibir "una multa de unos 500 euros, que para todo el verano les sale barato".
Desde la Plataforma de Afectados por la Okupación declaran que la familia de Hortensia está teniendo que afrontar las facturas del consumo que hacen los okupas porque "si Hortensia devuelve el recibo y no lo paga, por ley, entraría en la lista de morosos", explica Ricardo Bravo, portavoz de la Plataforma.
"Las compañías se aseguran el cobro de los suministros y lo van a hacer con quien figura como propietario, que es la víctima que no está disfrutando de la casa". Actualmente, Hortensia desconoce la situación que tiene lugar en la que fue su casa de toda la vida, "para ahorrarle el disgusto", relata su familia.
El portavoz de la Plataforma de Afectados por la Okupación lamenta que "existe la ley y existen fórmulas para que los ocupantes tengan que abandonar la vivienda, pero no funcionan". "Estamos viendo errores judiciales como que ahora Hortensia tenga que pagar 1.000 euros en facturas o que no haya habido una intervención judicial y policial más efectiva".