Fernando está en la dehesa de La Acebeda un entorno único rodeado de nieve y el agua cristalina, que baja por el arroyo. El encargado de hacernos de "Cicerón" por la zona ha sido Jesús, un burgalés que llegó a este pueblo por amor. Descubrimos que el nombre del pueblo viene dado por los numerosos acebos que hay en la zona, uno de ellos con más de 150 años de historia. Jesús no ha llevado a ver a la Virgen y la fuente, una pequeña construcción con forma de cruz que se sitúa en el camino que se hace para procesionar. De ahí hemos puesto rumbo al pueblo, dónde Jesús nos ha contado cómo antes se tiraban al pilón a los forasteros que se casaban con una mujer del pueblo y no pagaban la costumbre. El recorrido ha terminado en la iglesia de San Sebastián de la Acebeda, pequeña pero tremendamente acogedora.