La dehesa boyal de El Berrueco es un paraje muy amplio y espectacular. Tiene 128 hectáreas de monte y en el último inventario realizado en 2021, está catalogados unos 16.900 árboles. La vegetación la forman un 57% fresnos, un 18% enebros, arces de montpelllier y otras especies. Algunos árboles de esta dehesa podrían llegar a tener hasta 500 años.
Este paisaje está hecho por los vecinos de El Berrueco durante muchos años. La dehesa tiene la catalogación de Monte de Utilidad Pública, y su paisaje es consecuencia del trasmochado de sus fresnos. Este paisaje lo han conseguido los vecinos a base de esta técnica de poda.
Es una técnica de poda conservada en el tiempo durante siglos. Es cortar las ramas dejando unos 8-10 centímetros y dejar al fresno sin ramas. con eso el fresno se le corta a los dos o tres metros. Con las ramas que se cortaban las destinaban a la leña para hacer fuego en las chimeneas.
Desde un mirador se puede apreciar la distribución de la dehesa en 22 zonas. El llano de la dehesa, la mata de los esfuerzos son algunos de los nombres de estas. zonas. Esta dehesa boyal está protegida por un muro de piedra y se ha convertido en refugio para especies de la zona.
Hay una ruta para realizar senderismo muy recomendable. No llega a los cinco kilómetros y su trazado es circular. La senda pasa al lado de la Fuente del Gato, donde se observa un abrevadero tallado en granito. El recorrido continúa por un camino de tierra sin apenas inclinación.
El aclareo del bosque ha favorecido el desarrollo de los pastizales muy productivos que se siguen aprovechando en la actualidad. Todas estas características hacen que las fresnedas trasmochadas tengan un gran interés natural y cultural.