En Bruselas, el autodenominado 'convoy de la libertad' contra las vacunas ha fracasado en su intento de paralizar la ciudad sede de la Unión Europea, blindada con un millar de agentes que se han desplegado por la ciudad para impedir que la caravana tomara la capital belga.
Desorganizados y con menor poder de convocatoria del previsto, los antivacunas han provocado tan solo algunos problemas de tráfico. Eso sí, la policía ha practicado 30 detenciones por desórdenes y tenencia de armas.
Tras el intento de bloquear París el pasado sábado, los 'convois de la libertad' pusieron rumbo a Bruselas. Es su forma de mantener la protesta contra las medidas adoptadas para frenar la pandemia, en particular con el pase vacunal, que obliga a estar inmunizado para acceder a la mayor parte de los lugares públicos de Francia.
Europa no es el único punto del planeta con manifestaciones antivacunas. En Nueva Zelanda la Policía ha usado las canciones Baby Shark y La Macarena, reproducidas de manera permanente, para intentar dispersar la concentración de manifestantes antivacunas que lleva una semana acampada frente al Parlamento. No lo han conseguido.