Los Montes de Piedad vuelven a ser un salvavidas para muchas familias, sobre todo en época de crisis y de subida de precios, donde muchas personas tienen que recurrir al empeño de joyas o bienes, además de las ayudas y subvenciones.
Sin embargo, lo curioso es que en los últimos años el demandante de crédito está cambiando. Aunque siguen acudiendo los particulares solicitando un préstamo, cada vez utilizan más estos servicios los autónomos, los pequeños empresarios, e incluso profesores, quienes necesitan dinero de forma inmediata para, por ejemplo, pagar una factura.
Para muchos sigue siendo difícil dejar sus propiedades empeñadas. No obstante, como afirma un avalador, es una alternativa más de crédito, donde la joya se convierte en un aval, por lo que “no hay que estar indignado”.
El año pasado se formalizaron más de 230.000 operaciones por un valor de 250 millones de euros, siendo la mayoría por joyas como respaldo.